La Percusión junto a la voz son los dos instrumentos más instintivos, primarios y naturales que tiene el ser humano. Es por ello que deben ser trabajados y usados los primeros de todos para el buen desarrollo musical y personal de los niños. Este taller supone una iniciativa en la que la expresión artística se convierte en herramienta de transformación social, donde el arte es visto como un espacio de comunicación y aprendizaje común entre personas diversas.
Se trabaja a partir de la percusión como ámbito musical cercano, instintivo y común a las raíces de toda cultura y la improvisación musical. Veremos ritmos de distintas procedencias, africanos, afrobrasileños, flamencos, latinos,..., hasta algunos de los ritmos tradicionales de la Península Ibérica. Utilizaremos como instrumentos distintos “instrumentos de mano”, es decir, que se tocan con las manos. A esta actividad de ritmos tradicionales multiculturales, le sumaremos ritmos de música moderna como el pop, rock, funk,… los cuales aprenderemos a tocar también, en la batería.
Una vez alcanzados estos objetivos y conformado un grupo estable, se dotará a los alumnos de una mayor autonomía de forma progresiva, animándoles a la improvisación y a la propuesta de ritmos y coreografías, buscando en todo momento su implicación y su participación activa en las decisiones y el funcionamiento del grupo.
Niños/as de 9 a 13 años.